Actividad de aprendizaje 12. Cambiar acciones en tu vida

 La deforestación. 


Entender qué es este fenómeno es imprescindible si queremos buscar soluciones efectivas para frenar su avance. Si bien sus causas son por múltiples factores, tanto naturales como humanos, las consecuencias de la deforestación son irreversibles en el medio ambiente. A continuación, te presentamos algunas de las causas.

Factores naturales

Entre los factores naturales, se encuentran las enfermedades que contraen los árboles, los parásitos y los incendios forestales que, además de destruir los ecosistemas y la biodiversidad, liberan enormes cantidades de CO2 a la atmósfera.

Factores humanos

Sin embargo, las acciones humanas, como la expansión descontrolada de la agricultura debido al aumento de población y la necesidad de obtener recursos, la construcción de infraestructuras, las actividades mineras o la urbanización, son las principales responsables de la deforestación en todo el mundo con la tala de árboles sin control. 


Consecuencias de la deforestación

La deforestación es uno de los grandes problemas medioambientales a los que se enfrenta el planeta en la actualidad y, por ello, es urgente tomar medidas que contribuyan a reducir el daño que ocasiona. Entre las principales consecuencias de la deforestación se encuentran: 

  • Inestabilidad económica y ambiental: los espacios naturales, como los bosques y las selvas, son fuentes directas de materias primas, combustible y componentes de medicamentos, por lo que, a largo plazo, la falta de estos recursos también puede conducir a una inestabilidad económica y ambiental.
  • La alteración del ciclo del agua: los bosques hacen que los suelos sean más ricos en materia orgánica y más resistentes a procesos como la erosión. Sin embargo, la tala de estas masas forestales afecta al ciclo del agua, el cual se desplaza a otras zonas con vegetación, y esto hace que los suelos se degraden y pierdan esa cobertura. 
  • Desarrollo Sustentable 
  • Destaca la reforma al artículo 105 de la Ley General de Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente (LGEEPA) en donde se establece que los apoyos gubernamentales “que se otorguen a las actividades agropecuarias tendrán que ser compatibles con la protección de los suelos forestales, de manera que no se realice el cambio de uso de suelo de forestal a agrícola o pecuario”.
    Además, los Consejos Estatales Forestales garantizarán la participación de los representantes de comunidades, académicos, pueblos indígenas, profesional, industrial, sociedad civil, jóvenes, mujeres, y gobierno federal.
    Se regulará y fomentará el manejo integral y sustentable de los territorios forestales, la conservación, protección, restauración, producción, ordenación, cultivo, manejo y aprovechamiento de los ecosistemas con vocación forestal del país y sus recursos.
    Distribuye las competencias que en la materia correspondan a la Federación, a los estados, municipios y demarcaciones territoriales de la Ciudad de México.
    También contempla que la Federación establezca mecanismos de apoyo como los destinados al Programa de Desarrollo Forestal, al de Manejo Forestal Comunitario, al de Plantaciones Forestales Comerciales y la Reforestación y Conservación de los Suelos.
    Finalmente, esta nueva Ley permite incrementar el aprovechamiento legal y sustentable de los bosques en beneficio de sus legítimos poseedores, reducir la tala ilegal, evitar la deforestación y contribuir a la Deforestación Cero a la que México se ha comprometido llegar al 2030.



  • Conservación de la biodiversidad


Muchos de los árboles y arbustos nativos de México pueden ser potencialmente valiosos para ser utilizados en programas de reforestación, restauración ecológica y desarrollo agrosilvopastoril, tolerando variadas formas de manejo y cultivo en uno o más sistemas de uso de la tierra en regiones cálido-húmedas, templado-frías, áridas y semiáridas. Desafortunadamente, en la práctica de las actividades mencionadas, únicamente se propaga una fracción muy pequeña del total de la diversidad de los árboles y arbustos nativos de México en los viveros forestales.

Para hacer un uso exitoso de las especies nativas de cada región en programas de reforestación es indispensable profundizar nuestro conocimiento sobre la biología, la ecología, la propagación y el manejo de las especies disponibles, a fin de posibilitar su establecimiento y desarrollar técnicas eficientes de propagación, e incluso llegar a mejorar por selección sexual, clonal o ingeniería genética algunas de sus características más valiosas. Por otro lado, es también muy importante tomar en consideración la utilidad de las especies para la población local, ya que ello redituará en una mejor conservación de las zonas restauradas.

México ha desarrollado diversas herramientas que le han permitido regular y ejecutar de manera pertinente y adecuada sus proyectos de reforestación y en los últimos 30 años se han impulsado distintos programas para revertir los daños causados por la pérdida de bosques y selvas.

Aun cuando la humanidad tenga la necesidad apremiante de sembrar árboles, así como la conciencia de ésta, la tarea a enfrentar no es sencilla ni barata. Sin embargo, los beneficios que proveen los árboles son incontables. De hecho, sin ellos nuestra civilización no podría existir tal cual la conocemos.